Parque de Jerónimo Sastre

Historia:

Jerónimo Sastre Sastre (1973-1958) fue un personaje clave de la primera mitad del s.XX mirafloreño. Maestro de escuela, fue además impulsor de diversas iniciativas sociales y educativas, entre las que destacan la promoción de una residencia de ancianos, una biblioteca, una escuela infantil de apicultura (la primera de España) y, por supuesto, la construcción del magnífico edificio de las Antiguas Escuelas, junto al Ayuntamiento, que hoy acoge dependencias culturales y administrativas. Por todo ello fue muy querido en la localidad, llegando incluso a ser su alcalde.

El parque de Jerónimo Sastre se localiza al oeste de Miraflores, muy cercano a la entrada principal al casco urbano (por la c/Mayor y el P.º de Los Álamos). Sus límites actuales son los mismos desde al menos los años 40 del siglo XX, cuando se erigió la cruz dedicada a los caídos en la Guerra Civil, y siempre ha disfrutado de cierto grado de cobertura arbórea (indirecta en ocasiones, debido a los ejemplares plantados en las aceras contiguas de la c/Fabián Lorente).

No obstante, su acondicionamiento más completo como parque urbano se produjo en la remodelación de 1987, con motivo del cual, además, fue dedicado al respetado maestro local, dándole su nombre y colocando un busto (hoy junto al Ayuntamiento).

Una antigua imagen, de fecha indeterminada, mostrando un temprano intento de arbolamiento del parque.
Una imagen del parque al comienzo de las obras de reacondicionamiento de 1986-87.
El parque, tras su reacondicionamiento en 1987.
El monumento a los caídos durante la Guerra Civil que preside el parque Jerónimo Sastre, en la actualidad.
Inauguración del parque en 1987 (el anciano, probablemente, sea el hijo de Jerónimo Sastre).
El edificio de las Antiguas Escuelas, cuya construcción fue promovida por Jerónimo Sastre.
La entrada al edificio de las Antiguas Escuelas, con el agradecido reconocimiento a Jerónimo Sastre.
Busto de Jerónimo Sastre, en su momento en el parque al que da nombre, pero hoy reubicado a la entrada del edificio de las Antiguas Escuelas.

Inventario del arbolado:

Los  29 ejemplares del parque de Jerónimo Sastre se reparten entre 13 especies, lo que hace que sea un parque modesto en cuanto a densidad de árboles pero bastante diverso, en cambio. Sin duda, las especies de coníferas son su aspecto más destacable, empezando claramente por el bonito y ya bastante imponente ejemplar de secuoya gigante (con menos de 30 años aún es un «mozalbete»). Pero la media docena de cipreses que la flanquean, de momento, no la desmerecen en absoluto, y también pueden verse aquí ejemplares de tejo (raro en todo el inventario) y de tuya (muy frecuente en la ciudad, pero con pocos ejemplares tan desarrollados como estos).

Para interaccionar con el mapa desplázalo, haz zoom (separando dos dedos) y pulsa los elementos para abrir sus desplegables y descargar las fichas identificativas de cada una de las especies.

Considerado en su conjunto, el arbolado de este parque tiene una madurez y desarrollo algo dispares, debido a que combina la presencia de ya grandes ejemplares, algunos destinados a contarse entre los mayores árboles de la localidad (secuoya, ciprés común, acacia de tres púas), con numerosos pies de especies más pequeñas, bien por su propia naturaleza (ciruelo de Pissard, árbol del Paraíso), bien porque estén siendo mantenidas artificialmente en un porte semiarbustivo (ciprés de Monterrey, tejo, laurel cerezo).

Pero, en cualquier caso, por su emplazamiento privilegiado junto al centro neurálgico del municipio y el buen estado general de sus árboles, este parque constituye sin duda uno de los principales focos de atención en cuanto al patrimonio natural más estrictamente urbano de Miraflores de la Sierra.

Conócelo:

Magnolio y tuya a la entrada del parque.
En el parque crecen varias acacias ya de buen tamaño.
El conjunto formado por la secuoya y su escolta de grandes cipreses presiden el parque.
La cruz en homenaje a todos los caídos durante la Guerra Civil, al pie de la secuoya.
El aún muy ramoso tronco de la secuoya.
Las pequeñas piñas de la secuoya gigante.
Un ejemplar de árbol del Paraíso, raro en todo el inventario municipal.
Detalle de los bonitos frutos del tejo, una de las coníferas del parque.
La espectacular flor del magnolio, especie presente en el parque.
El parque cuenta con algunos columpios infantiles.

Y descubre el resto del inventario en: